Autoconsumo, diagnóstico: Asesinato

En los últimos días ha circulado un borrador del proyecto de real decreto por el que se establece la regulación de las condiciones administrativas, técnicas y económicas de las modalidades de suministro de energía eléctrica con autoconsumo y de producción de autoconsumo. Este RD cambiaría por completo el marco de remuneración de las instalaciones de autoconsumo.

Además, circula una propuesta de Orden por la que se revisan los peajes de acceso por la cual se vería reducido el coste regulado del término de energía, a cambio de una subida aún mayor del término de potencia. En caso de aprobarse esta Orden con el texto actual, conllevaría reducción del precio unitario por kWh, disminuyendo la rentabilidad de cualquier instalación de autoconsumo.

A continuación procederemos a evaluar el impacto económico de esta nueva regulación en una instalación fotovoltaica de 43,2 kWp, situada en zona climática III, observando los cambios en la remuneración del kWh producido y en los periodos de retorno de la inversión.

Acogiéndose al Real Decreto 1699/2011 y con el ATR vigente, esta instalación permitía ahorrarse el 55.661,48 kWh de la factura eléctrica al precio del periodo en el que fue producido. Esta energía producida se distribuye en los tres periodos de la tarifa 3.1A de la siguiente manera:

Los precios (y por tanto los ahorros) por kWh eran los siguientes, impuesto eléctrico incluido:

Teniendo en cuenta la distribución de la producción en los tres periodos de facturación, el ahorro en euros por kWh producido se cifraba en 0,11509 €/kWh.

Esta inversión, teniendo en cuenta una subida anual del precio de la energía de 4% y una pérdida de producción anual del 0,5%, proporcionaba la siguiente rentabilidad:

En caso de aprobarse este proyecto de real decreto y la propuesta de Orden en los términos actuales, la rentabilidad de la inversión se vería afectada por dos frentes:

1. El pago de peajes de respaldo.
2. La reducción de la parte regulada del precio de la energía.

Es decir, que no sólo tendremos que pagar un determinado peaje por cada kWh producido, sino que, al reducir el ATR, se verá reducirá el término de energía y por tanto nuestro ahorro por kWh.

Conviene hacer un inciso para tratar la particularidad que supone la subida de los términos de potencia que propone este borrador. Si bien es cierto que una instalación fotovoltaica nos permitirá demandar menor potencia de media en el mes, esto sólo nos servirá para reducir la potencia contratada en caso de tarifas de 6 periodos, ya que los posibles excesos en horas sin sol o días nublados serán pagados como recargos puntuales.

Sin embargo, en el caso de tarifas de 3 periodos, la potencia facturada es marcada por la potencia máxima marcada por periodo y mes. De modo que cualquier pico de potencia en horas de poca o nula producción echaría abajo cualquier ahorro en este sentido.

En la siguiente tabla vemos la remuneración por kWh que obtendríamos dentro de este marco legal, teniendo en cuenta la reducción del ATR y los peajes de respaldo a pagar.

Con la distribución de la energía producida en los tres periodos de facturación vista anteriormente, el ahorro en euros por kWh producido se cifra en 0,06633€/kWh.

Esto supone una reducción de la remuneración del 42,36% con respecto al caso anterior.

Debido a esta reducción de los ahorros de energía, la rentabilidad de la inversión queda de la siguiente manera:

Los 8,4 años de retorno se convierten en 13,5, lo que convierte la instalación de autoconsumo en una opción poco o nada atractiva desde el punto de vista económico.

El autoconsumo era nuestra última esperanza para relanzar un sector que no hace más que sufrir y padecer todos los recortes (cinco desde que empezó la legislatura) del ministro Soria a causa de una política de aniquilación, destrucción y que la encaminan de manera premeditada al más oscuro de los ocasos. De aprobarse el Real Decreto tal y como está redactado en la actualidad quedará cerrada cualquier atisbo de resurgimiento, pero si además le añaden la aprobación con el texto íntegro de la orden que hace referencia a la minoración del coste del ATR en el término de energía, la fotovoltaica quedará en nuestro país no marginada, sino ASESINADA.